sábado, 5 de mayo de 2012

Rafael Pombo, en su centenario




Hoy, entre otras cosas, se cumple el centenario de la muerte de Rafael Pombo, un poeta colombiano, muy famoso entre los niños. Todos hemos crecido con él. Todos nos hemos aprendido de memoria, y recitado e incluso actuado, alguna de sus fábulas en rima. Las más famosas están escritas en versos endecasílabos o dodecasílabos, a punta de pareados. Mi infancia tiene ese sonsonete —del que me ha costado librarme— como música de fondo.
La fábula por excelencia es "El Renacuajo Paseador", recitada hasta la saciedad, pero también están "La Pobre Viejecita", "Simón el Bobito", "Pastorcita", entre otras cientas.
Pero no es por eso que todos los colombianos compartimos por lo que le tengo un aprecio especial, sino por un recuerdo personal, unido a uno de sus libros Fábulas y verdades. Era el único libro "gordo" que teníamos en casa que me pudiera interesar. No sé cómo llegó allí, pues mi casa estaba plagada de libros de contabilidad y estadísticas (esto es lo que tiene tener unos padres matemáticos, no especialmente interesados en el mundo de las letras). Probablemente fue una compra de mi padre, que fue quién me lo presentó, antes de aprender a leer. No era una edición bonita, de esas que hacen ahora llenas de imágenes para niños y pasta dura. Era más bien feucha, reconozcámoslo, una portada de pasta blanda,  color lila desvaído y un dibujo en blanco y negro (creo) nada llamativo. Buena encuadernación, eso sí, pero la letra y el formato —cada poema empezaba en el mismo punto donde terminaba el anterior— hacía que los poemas, tan llenos de luz y buen humor, deslucieran un poco.
Dado que llegué a él —o él llegó a mí, a través de mi padre— antes de haber aprendido a leer, la forma me importó poco. La voz de mi padre le daba todo el color que le faltaba al libro. No recuerdo que me leyera mucho. Tan sólo alguna vez y "los de siempre", los que todos hemos escuchado una y otra vez. Al fin y al cabo el libro no era para niños, aunque muchas de sus poesías fueran infantiles. Por eso, más que lo que allí encontré, al libro le debo más bien la voz de mi padre, de quien aprendí —gracias a Pombo— una de mis primeras oraciones: "Oración del niño al acostarse" (aparece al final de la página que abre el link). No era una oración sin más, otra de tantas. Esta vez Pombo no me decía lo de siempre ("El hijo de Rana, Rin Rin Renacuajo / salió esta mañana muy tieso y muy majo..."), sino que me enseñaba a rezar. Más aún, una oración que tampoco era de las de siempre, esas que todos se sabían, que pasaban por tantas bocas. Esta oración la sentía mía, personal, exclusiva. Por esto, creo que con Pombo aprendí a rezar, de verdad, en un sentido personal, aunque sólo mucho tiempo después comprendiera el significado de "menesteroso" y qué era eso de "despertar en el seno del Señor". También fue después cuando descubrí que mi padre me engañaba y me hacía decir "por mi abuela te ruego", aunque en el original dijera "por mis hermanos te ruego". Supongo que cuando no tienes hermanos y sólo una abuela (a los otros tres no los conocí), da igual romper la métrica octosílaba. Ahora —aún lo rezo— he vuelto al original, pues al fin y al cabo hermanos somos todos los hombres (y, sinceramente, suena bastante mejor).

En el 2007, los mejores cantantes colombianos (Carlos Vives, Juanes, Fonseca, Andrés Cabas, Aterciopelados...) musicalizaron, con gran maestría, algunas de las principales obras del poeta colombiano y produjeron "Pombo Musical", un CD muy estiloso (nada que ver con mi pobre edición libresca), con el que le rendían homenaje. Un homenaje al que hoy nos unimos todos.
(La mejor canción, en mi opinión, es "Modelo Alfabético", aunque no forme parte de mis poemas de infancia. Muy carlosvivesca, que es casi como decir muy colombiana).

 http://www.famiositos.com/secciones/descargas/wallpapers/Pombo/ninos/2/1280x1024/images/1280-1024.jpg
 
http://1.bp.blogspot.com/-FjHlwJKcCjw/T4dbCebbRhI/AAAAAAAAAAw/zl5Cj6Roksc/s1600/71_PomboMusical_01_thumb1.jpg

4 comentarios:

  1. Muchas gracias! tengo que confesarte que mis experiencias con Pombo son muy similares, es más el año pasado estudiando un poco de literatura, cayo en mis manos "la hora de tinieblas".
    (si eres una de esas "existencialistas con fe" te lo recomiendo)

    ResponderEliminar
  2. No encuentro la oración qué dices (me siento corta)

    ResponderEliminar
  3. Tienes razón Uuq, el link no es preciso. Una vez que estés allí, vete a la página 71, ahí esta, al final de esa página.

    He visto que "La hora de las tinieblas" también está en Internet. He leído unos pocos, ¡muy bueno!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Muchas gracias! Me ha encantado: me la he copiado para aprendérmela... ;)

      Eliminar