sábado, 6 de noviembre de 2010

Diario del movimiento del mundo VI


El diario. ¿Dos días seguidos? Es que el mundo se mueve demasiado deprisa.

Frente a la muerte, el movimiento del mundo parece detenerse. Cualquier movimiento se hace relativo, todo lo demás da igual. Por dentro todo se ralentiza, pero en realidad el mundo exterior sigue con sus afanes y movimientos. Dan ganas de gritar: "¡Paraos! ¿No os dais cuenta? Ha pasado algo importante, ¡hay menos luz en este mundo!". Pero la gente sigue con sus afanes. El ejecutivo vuelve tarde de su trabajo, un niño llora porque no le han comprado un juguete, los mendigos cuentan y recuentan su limosna, los autobuses pitan en las calles. Y, por dentro, uno se pregunta: "¿Es que no lo notan? ¿Acaso no sienten que hace un poco más de frío?".
Hasta que pasa el tiempo y vuelve el movimiento. Los atascos y el ruido vuelven a formar parte de nosotros. Nos fundimos otra vez en el movimiento del mundo. Y sólo alguna vez, cuando nos cruzamos con el luto por la calle y reconocemos en él nuestra mirada, cuando sentimos en sus ojos aquel mismo reproche, volvemos a esa pregunta eterna: "¿Y si fuese a mí a quien se le acabara el tiempo, el movimiento?". Por suerte (?) todo vuelve a pasar y ese instante sólo dura un momento. Al final, nuestra vida pasa así, en intervalos de movimientos... y pausas. Movimientos... y pausas. Movimientos... y pausas. Y en cada pausa nace un anhelo: "Aunque me muera mañana, que la muerte no me sea repentina".

4 comentarios:

  1. "Cuando muere un artista el mundo pierde algo de su valor"...

    La muerte que es el final de la vida, es el principio del filosofar. Nada asusta tanto y se lleva tantos pensamientos nuestros.

    La muerte, la vida, el arte... ains!

    (Muy buena entrada)

    ResponderEliminar
  2. Absolutely agree.

    No me acuerdo quién "definía" el arte de la siguiente manera:

    "ARTE: Una letra de amor y tres de muerte." ¡Qué certero!

    ResponderEliminar
  3. Marce: Eres increíble, he leído algunas de tus publicaciones y no me asombrea tu talento!
    TE QUIERO MUCHÍSIMO
    Laura Osorio

    ResponderEliminar
  4. ¡OMG! ¿Cómo puedes aparecer así, tan de repente? ¡Qué ilusión! No sabes hace cuánto tiempo quiero hablar contigo, o enviarte una carta, o no sé... Mándame porfa un mail, así lo tengo y nos ponemos en contacto, pues me encantaría enviarte algo, así sea por Navidad.
    (Y cuéntame algo...)

    ResponderEliminar